Ciudad: Lérida. Fecha: miércoles 23 de enero de 2019. Hora: seis y media de la tarde. Lugar: Centro Cívico Balafia. Evento: Presentación del libro Laudaner, de Bea Magaña.
Han pasado casi tres semanas y sigo sin encontrar las palabras para describir cómo fue, pero sobre todo cómo me sentí. Podría emplear el término exitazo para lo primero, y no estaría exagerando. A pesar de la hora tan intempestiva que nos dieron para la presentación asistieron unas cuarenta personas, y si tenemos en cuenta que Lleida no es una ciudad muy grande (no como Madrid o Barcelona, en las que puedes hacer una presentación al mediodía y seguro que hay afluencia de público), que soy una autora desconocida y como quien dice primeriza (hasta la fecha sólo me he atrevido a sacar a la luz una de mis novelas, y fue autopublicada a través de Amazon), y que no hubo ningún anuncio en los diarios locales (pero todo esto ya te lo conté en mi entrada anterior) yo diría que no es pretencioso decir que fue un éxito de asistencia.
Para lo segundo me faltan términos. Arropada, emocionada, eufórica, segura, feliz... podrían servir bastante bien, y sin embargo siento que no son suficiente para describirlo. Así que, por una vez, voy a prescindir de las palabras y te voy a dejar la crónica en imágenes, porque creo que el reportaje que prepararon mis editoras te dará una idea mucho más clara que todos los adjetivos que yo me esfuerce en buscar.
Pero sí hay algo que quiero decirte antes de despedirme, y es que no debes permitir que el miedo te impida hacer aquello con lo que sueñas. El miedo escénico me llevó a elegir la autopublicación hace cinco años, y aunque no me arrepiento, ya que en ese momento no estaba ni remotamente preparada para hablar en público, me siento muy orgullosa de haber sido valiente en esta ocasión, pues a pesar de que no tenía ni idea de lo que iba a contar, más aún, no tenía ni idea de si habría alguien interesado en lo que pudiera contar sobre mi nuevo libro, una vez que asumí que tendría que hacerlo desaparecieron tanto el miedo como los nervios, y cuando ocupé mi asiento entre Lupe y Athman y miré al público me dije SíPuedo y lo hice. Pude, y lo disfruté. Pude, y viví una de las mejores experiencias de mi vida. Así que nunca digas No Puedo, No me atrevo, No pasa nada si no lo hago. Aunque tengas miedo, aunque los nervios te estén matando, aunque creas que no vas a ser capaz de pronunciar una sola frase coherente, aunque te dé vergüenza, hazlo, cumple tu sueño, porque ese día es una de las cosas más valiosas que guardarás para siempre en tu alacena de los recuerdos felices.
Ah, habrá una segunda presentación, esta vez en Barcelona, en el mes de mayo. Pero de esto te hablaré más adelante. Todavía estoy demasiado conmocionada, abrumada, eufórica y acelerada para escribir más de tres párrafos con coherencia 8)