jueves, 31 de octubre de 2013

Feliz Halloween (segunda parte, je)

No vengo a dejarte un relato de terror. No, porque el fragmento que te traigo esta noche no puede llamarse relato. Pero es Z, y ¿qué mejor momento que éste para mostrarte un poquito más? Considéralo un boceto, una primera sinopsis o un microrrelato, como prefieras. De aquí partió la idea. Y me apetece compartirla contigo.

Así celebro Halloween. Y, de paso, te muestro algo distinto a lo que has leído hasta ahora.

***


"Uno de los mejores comienzos de novela que he leído es el de El año de la Plaga, de Marc Pastor: Necesito un Apocalipsis o, por lo menos, unas vacaciones. A menudo, cuando estoy muy quemada, cuando toda la Humanidad parece haberse aliado para amargarme la existencia y me vence el desánimo, me acuerdo de Víctor Negro y formulo mi propio deseo: Necesito un apocalipsis; o, en su defecto, una aspirina.
Dicen que cuando deseas algo con mucha intensidad, lo más probable es que se acabe cumpliendo.
Pero ¿por qué tenían que ser zombis? ¿No podía haber sido otro tipo de monstruos? Alienígenas, máquinas del futuro, bichitos adorables que comen después de medianoche y se transforman en demonios traviesos, perros rabiosos, pájaros enloquecidos, ¡mira que hay donde elegir! Puestos a pedir, podía haber sido un apocalipsis light: inundaciones, terremotos, una glaciación, incluso el impacto de un asteroide gigantesco... desastre, todos muertos, fin de la historia. Pero no, tenía que ser algo horrible y asqueroso, algo que empieza y sigue, y sigue, y sigue... infección, contagio, epidemia, y nunca termina, porque la muerte sólo es el principio.
¿Qué narices de plan de acción voy a trazar? Lo más que puedo hacer es asegurarme de que no hay brechas en nuestro refugio, porque como la infección nos alcance la pesadilla no habrá hecho más que empezar. Al menos ahora estamos a salvo. Aunque, ¡hay que joderse! Me ha tocado sobrevivir al fin del mundo con el peor equipo que uno podría desear...
Uf. Necesito una aspirina. El apocalipsis ya lo tengo aquí."

Feliz Halloween!!!

A SONG FOR ALL SOULS' DAY (traducción aquí)

Near the midgnight,
when the sun is just a memory
and you count a million stars,
crickets stop singing
to listen to somebody
saying loudly an ancient hexe
forgotten for several centuries.

Put on your masks, children;
sing your songs, tell and play jokes;
somebody will full your bag of candies.
Pretend you are dangerous,
pretend you are frightened;
magic will start,
you all must believe.

Listen: it's All Soul's day,
Halloween's spirit extends
trouhg the town; pumpkins are
the masters of the night
with their grotesque smiles
illuminated from their inside.
Believe that are fairies,
o glow-worm, or Hell's fire
that lit up the night;
if you believe that they are just candles
the night will stop shining
and the earth will silence its beatings.

Cry, laugh, sing,
dance, make a lot of noise,
it's the best, it's better you won't listen
to the sounds of the night.

Mist extends level with the floor
like floating,
stars go out,
everything stay in silence for a seconds,
the time that takes passing away
the last peal of the midnight
that goes, floating in the air,
until it misses into the shadows.
Then, silence is broken;
the ground opens, and a pair
of boned hands appear,
like gloomy night daisies.
The rest of the body is
like a terror scream
in the middle of a a fairytale.

After that, only nightmare beings
that appear from the insides of the ground,
like vomited for the earth,
creatures that scape from their coffins
to add themselves al the party.

Put on your masks, children.
Sing and dance, laugh,
enjoy the party, because
you will be died soon.

Ghost and ghouls,
demons called with an ancient hexe;
there are more dead than alive
in the town, tonight.

The curse has been come true
another year. It's Halloween,
isn't it exciting?

Pumpkins' eyes are wicked,
they look at the empty streets
from their burning sockets,
and laugh while they wait
for your shit-scared scream.

Put on your masks, children.
It's midnight. Party is starting,
sing and dance while you can.
It's Halloween, isn't it funny?


S

miércoles, 23 de octubre de 2013

¡Mi primera reseña!

El chico perfecto no sabe bailar el twist lleva un mes en Amazon y durante este tiempo no ha hecho más que darme alegrías. El número de ejemplares vendidos en los dos formatos se me antoja muy elevado, para un período de tiempo tan corto, y me hace pensar que si lo hubiera publicado de forma tradicional, esto es, con una editorial que se encargara de la distribución, de modo que se pudiera conseguir en las librerías (especialmente en las librerías de Segovia y de Lleida), habría sido todo un éxito. Lo tendré en cuenta para mi próxima novela, je. 

Pero mejor que las ventas son las opiniones que ha cosechado hasta la fecha, todas positivas, que voy recibiendo por privado y que los lectores van dejando en la página de amazon, opiniones que puedes leer en este enlace. La historia gusta, mi prosa gusta, engancha, emociona. Lectores de género que no abrirían una novela romántica ni bajo tortura se han animado a leer la mía y han confesado haberse enamorado de ella. 
Bueno, no es que no lo esperase, pero ¡ilusiona tanto que te lo digan! 8)

Ayer recibí mi primera reseña, de la mano de un escritor al que aprecio y al que admiro muchísimo. Antonio Jareño, cuya novela No todos moriréis pasó por mis manitas de correctora y se llevó un Aprobado con Nota muy alta (y si no has leído su novela ya estás tardando en hacerte con ella, que es una de mis recomendadas), habla de mi chico perfecto en su nuevo blog, y sus palabras me hicieron llorar de la emoción.

Te invito a que visites su blog y leas su opinión. Si todavía no conoces a la Gata, puede que sus palabras te animen a querer conocerla. Y si ya la has leído, te invito a dejar tu opinión en amazon, en tu propio blog o aquí mismo, saber qué te ha sugerido es importante para mí.

Y hoy no me extiendo, que tengo una antología que corregir y dos relatos que escribir. Ah, pronto tendré noticias que darte. Deséame suerte, que ya sabes que el relato corto en mi asignatura pendiente!!!

martes, 8 de octubre de 2013

Mi NO-Crónica de la Expocon


O de cómo Bea necesita tres folios para decir que se lo pasó genial el sábado pasado ^^


Recuperada del viaje, aunque aún con resaca de emoción y de felicidad, me dispongo a escribir una NO-Crónica de mi paso por la Expocon de Zaragoza, porque mi presencia allí fue como espectadora más que como participante, y porque la mezcla de timidez, de nervios y de emoción no me permitió vivirla exactamente como autora. Fue mi primera visita a un acontecimiento de este tipo, y todo era nuevo para mí. Asistí por primera vez a una presentación de un libro, de una editorial, de una asociación, a una charla... No me atreví a hacer preguntas en las presentaciones, aunque tenía muchas; pero participé en la charla, casi muero de un infarto cuando me pasaron el micrófono, pero con voz temblorosa y taquicardia fui capaz de hablar un poquito en público. Me quedó claro que todavía no estoy preparada para presentar una de mis novelas (¡gracias, amazon, por haberme dado la oportunidad de tener la primera de ellas en mis manos ahorrándome la presentación!). Pero también me quedó claro que ni la vergüenza ni los nervios son mortales, mírame, sigo viva y me siento más fuerte que hace unos meses, y con más entusiasmo del que creí posible a principios de este año, cuando decidí que había llegado el momento de dejar aparcadas las dudas y los temores.


Para que veas lo que son los nervios: mi plan era hacer un montón de fotos, para colgarlas en el blog a modo de descripción: «mi aventura en la Expocon foto a foto». Hice la primera justo antes de entrar, la titulé «Yo estuve ahí», hice tres o cuatro más antes de empezar a presentarme (jajaja, qué optimista, presentarme yo; si por mí hubiera sido, ninguno de mis compañeros de letras conocería mi nombre después de todo ese largo día). Y después me olvidé de las fotos. Nervios, entusiasmo al abrazar a esos amigos a los que me moría por conocer en persona, felicidad, conversaciones interesantes y enriquecedoras, abrazos, abrazos, ¡adoro los abrazos! Y la crónica foto a foto quedó olvidada.
Aunque sí me traje en imágenes los tres momentos más mágicos de ese día.



Los que me conocen, los que me acompañan en mi viaje a través de los maravillosos senderos de Thèramon, saben que soy extremadamente tímida, ñoña hasta lo indecible, emocionalmente variable, insegura como persona y algo narcisista como escritora. Saben que los últimos diez años han sido oscuros y muy jodidos, que hasta hace un par de años no era capaz de escribir, que llevo desde entonces luchando contra un Bloqueo con mayúsculas y que rendirme no está en mi naturaleza. También saben que para superar ese bloqueo y poder volver a Thèramon me he alejado de mi mundo fantástico y me he adentrado en la Oscuridad, pues no conozco otro modo de vencerla que enfrentándola desde dentro. El resultado ha sido un No-relato de terror al que de momento llamo Z, aunque ése no es el título que tendrá cuando esté acabado. Y ha sido gracias a Z que he encontrado el valor para salir de mi burbuja, y que me he enfrentado a mi timidez y a mis dudas, que me he decidido a dar el salto y colocar una de mis novelas en amazon (¡y las alegrías que me está dando mi chico perfecto!) y a abandonar la seguridad de estas cuatro paredes... Y también saben que lo mío no es resumir, y que me pongo a contar algo y acabo contando más de lo que me había propuesto cuando empecé :P

Salí. Este año, a pesar del miedo, cogí un tren y me fui a Madrid. No vi mucho de la Feria del Libro, la verdad, pasé el día con dos de mis hermanos de mundos y no vi gran cosa de la feria. Pues algo parecido me pasó este sábado. Me fui a Zaragoza con Ana y con Athman, llegamos al sitio, Athman desapareció porque conocía a todo el mundo y tenía muchos abrazos que dar, y yo me encontré con mi querido Blasraiser Fernando Martínez Gimeno, motivo numero uno por el que quería ir a Zaragoza. ¿Sabes cuando conoces a alguien a quien aprecias, y por fin le ves en persona y resulta infinitamente más encantador de lo que ya era desde la pantalla de tu ordenador? Sentirte tan a gusto con alguien que se te pasan los nervios y la vergüenza, y se te olvida que hay muchas más personas a las que querías conocer, y desearías que el día no terminara nunca porque has conocido a alguien muy especial y te sientes inmensamente feliz. ¡Te quiero , Fer!


No soy una antipática, perdonadme, compañeros de letras a los que no me acerqué a saludar, soy muy tímida ¡y estaba con mi Fer!

La primera presentación fue la de «Body Shots», una antología de relatos que parte de una serie de ilustraciones terroríficas y maravillosas, obra de un tipo muy tímido (o eso me pareció cuando le oí hablar para el público) que me cayó bien enseguida, aunque apenas hablé con él. Dani Expósito es un artistazo, me enamoré de su trabajo cuando veía los enlaces que compartían en el Facebook amigos comunes, y a pesar de mi timidez me atreví a solicitarle amistad, porque deseaba conocer más de su obra. La presentación fue muy divertida, muy corta, y no hice preguntas, aunque no por falta de ganas.


La foto es muy mala, la cámara de mi móvil no funciona bien en la oscuridad.

Antes de la presentación llegó el segundo momento mágico del día. Estaba saludando a Dani, cuando alguien preguntó a mi espalda: ¿quién es Bea Magaña? Me volví, con mi carita de chica tímida y un «yo...» susurrado... ¡y allí estaba mi gemela, Carolina Márquez Rojas, el segundo abrazo épico del día! ¿Sabes cuando conoces a alguien, y sientes que has encontrado un espíritu afín, y luego lo ves en persona, y sabes que no te habías equivocado? Pues que lo sepas: las almas gemelas existen. ¡Te quiero, Carol!


La presentación de la editorial La Pastilla Roja me gustó muchísimo. David Rozas, A.m Caliani, Athman M. Charles, Alberto Guerrero y David Pardo presentaron la antología «No eres bienvenido», una recopilación de relatos cuya temática es los pueblos malditos, todos ellos firmados por autores españoles, algunos bastante conocidos y otros no tanto, pero como dijo Athman: las antologías son una forma de dar a conocer a escritores muy buenos que son desconocidos para los lectores; y de verdad que con este tipo de iniciativas se descubren grandes talentos. ¡La antología fue un éxito de ventas! Y yo me llevé a casa mi ejemplar, firmado por los autores que estaban allí ese día, je.


Me encantó conocer a Rozas y a Caliani, también a David Pardo, con el que hablé menos de lo que me hubiera gustado. A Alberto creo que ni llegué a saludarle; ¡a nadie se le ocurrió presentarnos! Pero ahora que ya nos hemos “conocido”, no seré tímida la próxima vez que nos encontremos 8)


Ah, creo que puedo decirlo, porque Rozas ya lo dijo en su blog: hola, soy Bea y soy el nuevo fichaje de La Pastilla roja (ya tengo mis rotus preparados, esperando a que la próxima antología caiga en mis manos de correctora).



Qué más, qué más... Después asistí a la presentación de los chicos (y chica) de ESMATER, una asociación de la que sé más bien poco y a la que no pertenezco (aunque si mi Z llega a ver la luz, quién sabe, siendo una escritora de terror quizás querrían admitirme). Naaa, en serio, ESMATER ya no es sólo un grupo de EScritores MAdrileños de TError, es una asociación que da cabida a (creo) todos los escritores españoles de (creo) cualquier género, porque, ya sabes, la unión hace la fuerza. Y por lo que vi, son una gran familia que se apoya y se ayuda, ¡y así es como debería ser siempre, cojones!, que todos estamos recorriendo el mismo camino, y las rencillas y los malos rollos no van a ayudarnos a hacernos visibles para el lector que sigue pensando que todo lo que va firmado por un autor español es malo o que todo lo que viene de fuera es mejor que lo nuestro.


Con Marta Junquera crucé un par de frases, ¡me encantó cómo se presentó!, a Caliani le di un par de abrazos (me encantó ese hombre), Víctor Blazquez y Alfonso Zamora (vicepresidente y presidente de ESMATER respectivamente) me imponían demasiado respeto, creo que no me atreví a saludarles; y con Antonio “Tolu” tengo que hablar algún día, tampoco nos presentaron, pero fue muy amable conmigo durante la charla que el grupo de ESMATER dio más tarde y en la que los asistentes intervinimos (yo con mi familiar taquicardia al tener un micrófono en la mano y hablar delante de varias decenas de personas). Así que de Tolu me llevo un muy buen recuerdo, y aquí le dejo mi agradecimiento y el abrazo que no me atreví a darle.


A la charla se unieron Carlos J. Lluch, al que tampoco me presentaron pero con el que me reí mucho, qué tipo tan ocurrente, me encantó. David Rozas, con el que ya empezaba a hacer buenas migas. Y mi reina Irene Comendador, el tercer momento mágico del día, y un abrazo que llevaba dos años deseando dar.

Parecía que empezaba a soltarme, estaba hablando con alguien sin nervios, como si fuera la persona más sociable del mundo... ¡y me comporté como una maleducada! dejándole con la palabra en la boca. ¡Pero es que fue ver a mi Ire y el corazón me dio un vuelco de alegría! ¿Sabes cuando conoces a alguien, habláis a veces, y sabes que le quieres aunque no le conozcas? Pues yo quiero a mi Ire desde hace muchísimo tiempo, y aunque estuve en Madrid el mismo día en que ella firmaba su novela, no la vi, porque no supe que había estado allí hasta el día siguiente, cuando vi las fotos en el Facebook. Y es que cuando me meto en el Office y me pongo a corregir, me pierdo todas las novedades, las noticias y los eventos. ¡Me dio tanta rabia!
Pero el Cosmos es bueno, nos reunió en Zaragoza, y pude darle a mi Ire ese abrazo épico que llevaba dos años guardando para ella. ¡Qué coño! Le di muuuuchos abrazos. Y no la habría soltado, es más encantadora de lo que ya sabía que era ^^ ¡Te quiero Ire!


Durante la comida acaparé a Fer, ¡no me lo tengáis en cuenta, le adoro!, y conocí a Oscar Suañez, conversación interesante e interminable sobre libros. ¡Vaya! Si al final resulta que hice un montón de amigos! 8)


En el stand de la editorial Palabras de Agua saludé a Juande Garduño, al que conocí durante mi visita a la Feria del Libro, y hablé un poquito con Antonio “Catástrofe” Sánchez, el autor de «Zona Catastrófica», libro que gané hace unas semanas en el Facebook por dar mi opinión sobre la magnífica portada, obra de Dani Expósito, pero no pude recogerlo porque la editora no había podido acudir a la Expocon. Allí estaba Pepa Mayo, a la que no me atreví a presentarme. (Y ya van unos cuantos). De los muchos compañeros de letras a los que nadie me presentó (y yo no fui capaz de vencer a mi timidez para presentarme solita), quiero pedir disculpas a Miguel Angel Naharro, cuyo nombre pregunté creo que a Fer, y al que saludé de pasada cuando me marchaba. ¡Pero es que no se vale que los demás también sean tímidos! Espero coincidir contigo en otra ocasión, Doc. Y el abrazo que me quedé sin dar, fue la ausencia de Karol Scandiu, que imaginé que acudiría junto con Irene: ¡te lo tengo guardado, unicornio!

A los demás los voy conociendo estos días gracias a Facebook. ¡Hay que joderse, que los tuve ahí mismo y me quedé con las ganas, por tímida y por idiota! Pero he aprendido algo: si eres tímido y no te atreves a acercarte a la gente, luego lo lamentas. Así que la próxima vez... bueno, la próxima vez obligaré a Fer a que me presente a todo el mundo ;)